En primer lugar, descubrió una anomalía en el corazón. Después de haber visto cómo se le ha impedido que se ejecuta fuera de España. Y luego luchó por la verdad. Parte fugitivo, con una orden del gobierno que le prohíbe impugnar hasta una carrera popular en el lado de su casa. El talento estaba ahí, pero Javier Gómez Noya se llevó una enorme capacidad mental para superar los contratiempos que la vida era muy joven. Nunca bajaron los brazos. El dolor se hizo más fuerte y libre ya de la competición, y vigilar su estado de salud, transformó el deporte del triatlón como el primer especialista de la dulzura. Nada, andar y correr como el mejor. Un atleta capaz de d