Ramón le encanta dibujar. Siempre. Nada. Dondequiera que pueda ser. El dibujo que le hace feliz. Pero en un segundo, todo cambia. Una única observación imprudente hermano mayor, hace los bocetos que preocupado Ramón. Por suerte para Ramón, su hermana, Marisol, ve el mundo de manera diferente, y le ayuda a descubrir su arte, el arte de «casi».El autor de el poder de la necesidad de encender la llama de la creatividad con cuidado. Aprender el pensamiento creativo de los «casi» es más hermoso y más real que el arte que sigue las reglas de la perfección. El despertar de los hijos de la inspiración y de la mejor sensación de bienestar cuando se cree en algo: una idea, un dibujo, etc