El silencio de la ciudad blanca es una combinación perfecta de historia y novela negra que mantendrá al lector en vilo desde la primera página.

Eva García Sáenz de Urturi vuelve a sorprendernos como lo hizo con sus dos primeras novelas, con un control perfecto del género novela negra, un género en el que empieza su andadura con esta espléndida historia.

Eva García nos lleva a Vitoria para ser partícipes de una escalofriante historia. Hace veinte años se produjeron cuatro dobles asesinatos en esta ciudad. Todos estos crímenes tenían en común una serie de aspectos que los hacían realmente curiosos. Siempre se asesinaba a un hombre y a una mujer. Siempre las víctimas tenían edades que acaban en cero o cinco y siempre las siguientes víctimas tenían cinco años más que las anteriores. Aparecieron muertos dos bebes recién nacidos, unos niños de cinco años, de diez y de quince respectivamente. Además, las víctimas siempre tienen apellidos compuestos y aparecen los cuerpos colocados de una manera peculiar y en lugares emblemáticos de la ciudad.

Se declaró culpable de estos terribles crímenes al arqueólogo Tasio Ortiz de Zárate siendo detenido por su propio hermano gemelo agente de policía de la ciudad. Tasio ha cumplido su condena y está a punto de salir de prisión, pero unos días antes de que esto ocurra aparecen muertos un chico y una chica de veinte años en la Catedral Vieja de Vitoria, desnudos y con la mano de cada uno acariciando la cara del otro. Tasio no ha podido cometer estos asesinatos, está en prisión, pero o alguien le está imitando o realmente él puede influir en alguien para que lleva a cabo estos terribles actos.

El encargado de investigar estos nuevos crímenes es Unai López de Ayala, conocido como Kraken, un experto en perfiles criminales que desarrolla una marcada obsesión por evitar que estos asesinatos se produzcan. Una tragedia personal ocurrida tiempo atrás le lleva a encarar este caso de una forma poco convencional, no es uno más y los métodos que adopta para llevar la investigación no terminan de convencer a su jefa Alba.

Esta estupenda novela que nos permite dar un paseo por las calles de Vitoria, una protagonista indiscutible de esta historia tan trepidante. Con una ambientación magnífica, en esta novela quedan reflejados lugares como la calle Dato, la Catedral, la Casa del Cordón, etc. Además, se entremezclan nociones del pasado, mitología y leyendas de Álava con la psicología criminal, una realidad trepidante, compuesta por asesinatos que recuerdan a los ocurridos muchos años atrás y devuelven el miedo entre los habitantes de Vitoria. Personajes muy logrados y una historia trepidante, hacen de esta novela una lectura obligada para todos los amantes de la novela negra y todos aquellos que quieran vivir momentos apasionantes en el intrincado mundo de la mente criminal.

Una narración a través de la cual el lector puede enlazar perfectamente todos los detalles que van apareciendo para llegar a resolver el puzzle que da vida a esta historia., descubrir quién es el autor de los asesinatos que están teniendo lugar.