Carla Laubalo nos da una historia que es honesto, positivo y estimulante sobre el acoso escolar, que nos anima a abrazar la difernecia y a luchar por nosotros mismos.

«En todo el tiempo que duró lo que nunca he contado a nadie. He tenido miedo. No sé qué tenía miedo. Pero lo que había. El miedo es una cosa terrible. Paralizante. Es como un nudo en el estómago que no te deja respirar, que no dejo de pensar y reaccionar. Pero he aprendido algo:

TODOS SOMOS DIFERENTES

y es lo correcto.»