En la actualidad, la internacionalización de los problemas de la justicia exige repensar a fondo sus principios, los objetivos, porque de conceptos tan importantes como, por ejemplo, la justicia social requiere de una nueva y sólida base.
En las Teorías de la justicia, el eminente investigador en Ciencia Política, Brian Barry, ofrece un análisis detallado y sistemático de la utilización de dos teorías que son considerados como rivales: la justicia entendida como una garantía de beneficio mutuo, y la justicia se entiende como el principio de imparcialidad. Las dos teorías comparten dos características importantes. Primero de todo, tienen en común la idea de que las cuestiones de la justicia surgen cuando existe un conflicto de intereses entre los individuos o entre los diferentes grupos, y, en segundo lugar, también comparten la idea de que la justicia es algo que podríamos llegar a un acuerdo racional. Pero, ¿cómo difieren entre los dos enfoques?
El primer punto de vista se centra en la idea de que el acuerdo refleja las obligaciones derivadas de la convocatoria para el interés personal del individuo a comportarse de una manera justa, mientras que el segundo enfoque no está limitado por el requisito de que todo el mundo está convencido de que el ser sólo es ventajoso para él.
Con la exposición y el análisis crítico de los fundamentos de estas dos teorías, Brian Barry se extiende sustancialmente en el debate sobre la justicia social que comenzó a revolucionar el pensamiento jurídico desde la aparición de la Teoría de la justicia, de John Rawls.